POR FAVOR LEA PARA PODER SER ÚTIL, A DEFENDER DE LA HAMBRUNA, CON CONOCIMIENTO Y VALENTÍA

   El fin de la guerra fría, el derrumbamiento del comunismo se tendría que haber traducido en una inmediata disminución de los gastos militares, pero la codicia inventó guerras de baja intensidad, para continuar con sus enormes ganancias y poder. Un sistema internacional manejado por una sola potencia con todas a favor y África cómo muchos países periféricos y no periféricos mueren de hambre con una economía dominante y absoluta. Miren este “salvataje”, miles de millones para el grupo de grandes corporaciones financieras que son los responsables absolu-tos de esta crisis mundial. Cuando se pierde la confianza todo se derrumba, y ellos sé encargaron puntualmente de esto.

    Es imposible comprender que los premiados con cifras inimaginables son los hacedores de esta circunstancia, mucho -más caótica que la segunda guerra mundial- éste sumerge al género hu-mano en la tragedia más escandalosa pero demuestra quienes son los que recibirán el esfuerzo de los fondos de inversión entre otros, de millones de asalariados.

    El titular de la Reserva Federal, Ben Bernanke , a través de su filial en Nueva York, inyectó a American International Group (AIG) otros 37.800 millones de dólares en efectivo a cambio de títulos de la aseguradora estadounidense, informó el banco central.

       El importe se suma a los 85 mil millones de dólares que el gobierno estadounidense empleó para rescatar a la empresa el pasado 16 de septiembre mediante la compra del 80 por ciento de sus acciones.

     LEAN BIEN ESTO: no es mas que un hecho pero da pautas de cómo disfrutan de nuestra insensatez, el anuncio de la Reserva Federal tuvo lugar después de que legisladores del Congreso norteamericano denunciaran el martes que ejecutivos de AIG se habían gastado más de 440.000 dólares en un lujoso hotel de California, El St. Regis de Monarch Beach, apenas una semana después de que el gobierno acudiera al rescate de la firma. La noticia desató duras críticas entre legisladores y la sociedad estadounidense.

      Contradicción: el aviso de AIG antes de quebrar: “Tenemos la oportunidad de hacer un mun-do más próspero y mejor para vivir”. Qué hipocresía, pero esta realidad se la vence si todos colaboramos de distintas maneras. Los que piensan, los que planifican, los estrategas políti-cos y económicos, los intelectuales que no se vendieron, los epistemólogos, filósofos, histo-riadores, siquiatras, sociólogos, científicos, actores que participaron contra las guerras, etc., pero no podemos quedarnos e ir a descansar pensando en millones de niños, ancianos, mujeres y hombres que no tienen mas que llorar su silencio de muerte, sin que nadie los atienda.

     No hay fin para la esperanza, sin comprometemos es negarse a nuestra condición de seres y humanos hasta que nos quede un hálito de vida.

    El dios de la famosa libertad de mercado del Estado americano se pasa a comprar activos privados, o sea a estatizar palabra sepultada por los principios del capitalismo salvaje, una contradicción sin límites ¡qué diría Adam Smith! Padre de la economía política e inspirador de la doctrina liberal, su libro es el preámbulo del liberalismo, “Investigaciones sobre la naturaleza y causa de la riqueza de las naciones”, que el presidente Bush destroza con total espontaneidad, ¡por Dios no entienden que esto es la muerte de millones de personas!.

   Otra lejana esperanza; la perspectiva de un nuevo papel de las Naciones Unidas y sus organismos que hoy participan claramente en estas circunstancias, el Director Gerente del F. M. I. en plena crisis de desconfianza sale a predecir más atroces perspectivas. En plena rueda de la bolsa de Nueva York, también Paulson secretario del tesoro de los EEUU, advierte que serán muchas entidades que se derrumbarán. Es imposible creer en este dislate, que fue producto de malos negocios hipotecarios, hay millones de operaciones encubiertas y asientos contables inimaginables.

     Estos personajes Paulson como Bernanke trabajaron mas de treinta años para la banca de inversión. Este engaño despreciable no es pérdida de dinero es pérdida de vidas y que no tienen nada que ver con esta guerra desatada contra toda la humanidad.

     Quedan los derechos humanos ¿existieron alguna vez para estos ogros?, o para las Naciones Unidas o sus entidades, se necesitan algunas ONGs que se planten con bizarría. Sí hay algunas desgraciadamente son pocas y muy combatidas.

    Un nuevo sistema universal será la consecuencia, no podemos esperar todo de Dios, ahora nos toca mover a nosotros.

   Escribiré y seguiré hasta demostrar que aunque muchos sueñan utopías, éstas mas de cien veces se hicieron realidad y prefiero morir por una ilusión siendo un ideal humano y benéfico